José Echegaray nació en Madrid el 19 de abril de 1832. Su padre, José Echegaray Lacosta, era médico y profesor de instituto, natural de Zaragoza, y su madre, Manuela Eizaguirre Charler, natural de Azcoitia, Guipúzcoa. Con 5 años de edad su familia se trasladó a Murcia, por motivos laborales de su padre, donde pasó su infancia y realizó los estudios correspondientes a la enseñanza primaria. Fue allí, en el Instituto de Segunda Enseñanza de Murcia, donde comenzó su afición por las matemáticas. «Obtenido el grado de bachiller», se trasladó a Madrid y tras conseguir el título en el Instituto San Isidro, ingresó en 1848 en la primitiva Escuela de Caminos. Cumplidos los veinte, salió de la Escuela de Madrid con el título de Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, que había obtenido con el número uno de su promoción, y se tuvo que desplazar a Almería y Granada para incorporarse a su primer trabajo.
En unión de Gabriel Rodríguez fundó El Economista, revista en la que escribió numerosos artículos, iniciando de esta manera una actividad periodística que no abandonaría a lo largo de toda su vida. Asimismo, participó en el establecimiento, en abril de 1850, de la Asociación para la Reforma de los Aranceles y, también, fue ponente en las conferencias dominicales sobre la educación de la mujer (Universidad de Madrid), con la conferencia 'Influencia del estudio de las ciencias físicas en la educación de la mujer' (Madrid, 1869).
En su juventud leía a Goethe, Homero y Balzac, lecturas que alternaba con las de matemáticos como Gauss, Legendre y Lagrange. José Echegaray mantuvo una gran actividad hasta su muerte, ocurrida el 14 de septiembre de 1916 en Madrid. Su extensa obra no dejó de crecer en la vejez: en la etapa final de su vida escribió 25 o 30 tomos de Física matemática.
En 1854 comenzó a dar clase en la Escuela de Ingenieros de Caminos haciéndose cargo de la secretaría de la misma. Allí dio clases de matemáticas, estereotomía, hidráulica, geometría descriptiva, cálculo diferencial y física desde ese año hasta 1868. De 1858 a 1860 también fue profesor de la Escuela de Ayudantes de Obras Públicas.
Diez años más tarde, cuando contaba treinta y dos años de edad, fue elegido miembro de la Real Academia de las Ciencias Exactas. El discurso de ingreso, titulado 'Historia de las matemáticas puras en nuestra España', en el que hizo un balance, exageradamente negativo y con determinadas lagunas, de la matemática española a través de la historia y en el que defendía la «ciencia básica» frente a la «ciencia práctica», fue fuente de una gran polémica.
En su carrera como científico y profesor publicó muchas obras sobre física y matemáticas, algunas de ellas, publicadas en su primera etapa, si bien Echegaray estuvo escribiendo hasta el final de sus días.
Tras la Revolución de 1868 y la entrada de Prim en Madrid, Ruiz Zorrilla, con el que había participado activamente en la fundación del Partido Radical, nombró a Echegaray Director General de Obras Públicas, cargo que ocuparía hasta 1869, cuando fue nombrado Ministro de Fomento (1870 y 1872) y de Hacienda entre 1872 y 1874. En 1870 formó parte de la comisión que recibió al rey Amadeo de Saboya en Cartagena. Como Ministro de Fomento realizó la Ley de Bases de Ferrocarriles.
La abdicación de Amadeo de Saboya el 11 de febrero de 1873 hizo que el gobierno de Ruiz Zorrilla fuera destituido y se formara un nuevo gabinete republicano que sería depuesto con la entrada del ejército en el Congreso en enero de 1874 al mando de Pavía. Al golpe siguió la formación de un gobierno de concentración, el cual volvió a requerir los servicios de Echegaray como Ministro de Hacienda, desde donde se le daría al Banco de España el carácter de banco nacional con el monopolio de emisión de billetes.
Dejó el Ministerio de Hacienda para dedicarse a la literatura. En 1905, regresó de nuevo al Ministerio de Hacienda durante el reinado de Alfonso XIII, desaparecido su fervor republicano. Fue además senador vitalicio y presidente del Consejo de Instrucción Pública.
En 1865, comenzó su actividad literaria con 'La hija natural', aunque no llegó a estrenarla en esa época. Luego, en 1874, escribió 'El libro talonario', considerada el comienzo de su producción como dramaturgo, con el pseudónimo anagramático de "Jorge Hayeseca". Estrenó 67 obras de teatro, 34 de ellas en verso, con gran éxito entre el público de la época, aunque desprovistas de valor literario para la crítica posterior. En 1896 fue elegido miembro de la Real Academia Española. En su primera época sus obras estaban inmersas en la melancolía romántica, muy propia de la época, pero más adelante adquirió un tono más social con una evidente influencia del noruego Henrik Ibsen.
En 1904, Echegaray compartió el Premio Nobel de Literatura con el poeta provenzal Frédéric Mistral, convirtiéndose así en el primer español en recibir un premio Nobel. El premio le fue entregado en Madrid, el 18 de marzo de 1905, por el rey y la comisión sueca organizadora. La concesión del Nobel de Literatura escandalizó a las vanguardias literarias españolas y, en particular, a los escritores de la generación del 98. En ese tiempo Echegaray no era considerado un dramaturgo excepcional y su obra era criticada muy duramente por escritores de tanto relieve como Clarín o Emilia Pardo Bazán, aunque de un modo no siempre consecuente. En el propio Clarín pueden leerse críticas elogiosas. Él mismo mantuvo siempre una actitud distante con sus obras, no obstante contaba con la admiración de autores como Bernard Shaw o Pirandello. Pero Echegaray tenía un gran prestigio en la España de principios del siglo XX, un prestigio que alcanzaba los campos de la literatura, la ciencia y la política y una asentada fama en la Europa de su tiempo. Sus obras triunfaron en ciudades como Londres, París, Berlín y Estocolmo.
Fue presidente del Ateneo de Madrid (1898-1899); presidente de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles durante el periodo 1903 a 1908; miembro de la Real Academia Española donde ocupó el sillón "e" minúscula entre 1894 y 1916; Senador vitalicio (1900) y dos veces presidente de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (1894-1896 y 1901-1916); primer presidente de la Sociedad Española de Física y Química, creada en 1903; catedrático de Física matemática de la Universidad Central de Madrid (1905); presidente de la sección de Matemáticas de la Asociación Española para el Progreso de las Ciencias (1908); y primer presidente de la Sociedad Matemática Española (1911). En 1907, a propuesta de Ramón y Cajal, la Academia de Ciencias creó la Medalla Echegaray y se le concedió a José Echegaray la primera de ellas.
[Fuente: Wikipedia]
En su juventud leía a Goethe, Homero y Balzac, lecturas que alternaba con las de matemáticos como Gauss, Legendre y Lagrange. José Echegaray mantuvo una gran actividad hasta su muerte, ocurrida el 14 de septiembre de 1916 en Madrid. Su extensa obra no dejó de crecer en la vejez: en la etapa final de su vida escribió 25 o 30 tomos de Física matemática.
En 1854 comenzó a dar clase en la Escuela de Ingenieros de Caminos haciéndose cargo de la secretaría de la misma. Allí dio clases de matemáticas, estereotomía, hidráulica, geometría descriptiva, cálculo diferencial y física desde ese año hasta 1868. De 1858 a 1860 también fue profesor de la Escuela de Ayudantes de Obras Públicas.
Diez años más tarde, cuando contaba treinta y dos años de edad, fue elegido miembro de la Real Academia de las Ciencias Exactas. El discurso de ingreso, titulado 'Historia de las matemáticas puras en nuestra España', en el que hizo un balance, exageradamente negativo y con determinadas lagunas, de la matemática española a través de la historia y en el que defendía la «ciencia básica» frente a la «ciencia práctica», fue fuente de una gran polémica.
En su carrera como científico y profesor publicó muchas obras sobre física y matemáticas, algunas de ellas, publicadas en su primera etapa, si bien Echegaray estuvo escribiendo hasta el final de sus días.
Tras la Revolución de 1868 y la entrada de Prim en Madrid, Ruiz Zorrilla, con el que había participado activamente en la fundación del Partido Radical, nombró a Echegaray Director General de Obras Públicas, cargo que ocuparía hasta 1869, cuando fue nombrado Ministro de Fomento (1870 y 1872) y de Hacienda entre 1872 y 1874. En 1870 formó parte de la comisión que recibió al rey Amadeo de Saboya en Cartagena. Como Ministro de Fomento realizó la Ley de Bases de Ferrocarriles.
La abdicación de Amadeo de Saboya el 11 de febrero de 1873 hizo que el gobierno de Ruiz Zorrilla fuera destituido y se formara un nuevo gabinete republicano que sería depuesto con la entrada del ejército en el Congreso en enero de 1874 al mando de Pavía. Al golpe siguió la formación de un gobierno de concentración, el cual volvió a requerir los servicios de Echegaray como Ministro de Hacienda, desde donde se le daría al Banco de España el carácter de banco nacional con el monopolio de emisión de billetes.
Dejó el Ministerio de Hacienda para dedicarse a la literatura. En 1905, regresó de nuevo al Ministerio de Hacienda durante el reinado de Alfonso XIII, desaparecido su fervor republicano. Fue además senador vitalicio y presidente del Consejo de Instrucción Pública.
En 1865, comenzó su actividad literaria con 'La hija natural', aunque no llegó a estrenarla en esa época. Luego, en 1874, escribió 'El libro talonario', considerada el comienzo de su producción como dramaturgo, con el pseudónimo anagramático de "Jorge Hayeseca". Estrenó 67 obras de teatro, 34 de ellas en verso, con gran éxito entre el público de la época, aunque desprovistas de valor literario para la crítica posterior. En 1896 fue elegido miembro de la Real Academia Española. En su primera época sus obras estaban inmersas en la melancolía romántica, muy propia de la época, pero más adelante adquirió un tono más social con una evidente influencia del noruego Henrik Ibsen.
En 1904, Echegaray compartió el Premio Nobel de Literatura con el poeta provenzal Frédéric Mistral, convirtiéndose así en el primer español en recibir un premio Nobel. El premio le fue entregado en Madrid, el 18 de marzo de 1905, por el rey y la comisión sueca organizadora. La concesión del Nobel de Literatura escandalizó a las vanguardias literarias españolas y, en particular, a los escritores de la generación del 98. En ese tiempo Echegaray no era considerado un dramaturgo excepcional y su obra era criticada muy duramente por escritores de tanto relieve como Clarín o Emilia Pardo Bazán, aunque de un modo no siempre consecuente. En el propio Clarín pueden leerse críticas elogiosas. Él mismo mantuvo siempre una actitud distante con sus obras, no obstante contaba con la admiración de autores como Bernard Shaw o Pirandello. Pero Echegaray tenía un gran prestigio en la España de principios del siglo XX, un prestigio que alcanzaba los campos de la literatura, la ciencia y la política y una asentada fama en la Europa de su tiempo. Sus obras triunfaron en ciudades como Londres, París, Berlín y Estocolmo.
Fue presidente del Ateneo de Madrid (1898-1899); presidente de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles durante el periodo 1903 a 1908; miembro de la Real Academia Española donde ocupó el sillón "e" minúscula entre 1894 y 1916; Senador vitalicio (1900) y dos veces presidente de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (1894-1896 y 1901-1916); primer presidente de la Sociedad Española de Física y Química, creada en 1903; catedrático de Física matemática de la Universidad Central de Madrid (1905); presidente de la sección de Matemáticas de la Asociación Española para el Progreso de las Ciencias (1908); y primer presidente de la Sociedad Matemática Española (1911). En 1907, a propuesta de Ramón y Cajal, la Academia de Ciencias creó la Medalla Echegaray y se le concedió a José Echegaray la primera de ellas.
[Fuente: Wikipedia]
No hay comentarios:
Publicar un comentario